RECORTES DE COLOMBOFILIA |
19/06/2013 |
LA FORMACION DE UNA LINEA, UNA VERDADERA PASION
Por el fallecido Noel De Scheemaecker EXTRAIDO DE PIGEON RIT –BELGICA-
El hombre conoce poco de sí mismo…La ciencia que lo enorgullece es prácticamente generada en un 100% por las generaciones pasadas. El saber dentro de tal o cual dominio le ha sido legado por otros. Es muy raro que uno descubra algo nuevo, y cuando lo hace es llamado un “genio”.
Y aquí quisiera mostrar el ridículo de colombófilos que hablan sin tapujos de “su raza” como si fueran Dios, el padre en persona, negando al César lo que es del César. Cuando ellos tienen intereses –en vista de la venta de sus palomas- de hacer brillar un nombre que les permita hacer algún dinero adicional por sus palomas vendidas, ellos no dudarán ni un segundo en señalarlo…mas cuando la citación de un nombre tenga un efecto contrario, ellos harán silencio sobre la “raza” de sus palomas. Cuando Marissen (colombófilo destacado en una temporada) acumulaba resultados por doquier, Juan y Pedro (ejemplos) andaban por todos lados diciendo “raza Marissen” dentro de sus palomares, pero cuando Marissen tuvo un revés y sus méritos en los resultados disminuyeron, su nombre no era más útil y no se lo citaba más.
Esto me hacía reír, al demostrar la pequeñez de espíritu de tales amateurs, que no revelaban la verdad salvo que les conviniera. Un signo de estos tiempos: ¡el fin justifica los medios!
Cada colombófilo debería tener como objetivo constituir una línea propia. El camino es largo y arduo, pero mientras ascendemos, estaremos por el buen camino. En este proceso muy lento, los fracasos pueden aparecer, pero jamás debemos pensar en abandonar. El que no lucha por el progreso es un hombre perdido dentro de nuestro deporte. El que piensa “yo ya llegué a la meta” salta la valla y se cae, tarde o temprano, al abismo. El éxito en la creación de una línea depende esencialmente de la severidad en la selección. Sin embargo, esta severidad no nos alcanza, porque este trabajo se limita a eliminar los productos malos de la crianza. Hace falta también reforzar las cualidades buenas y mitigar las fallas a través de juiciosos acoplamientos.
¿Que es una falla? He hablado a través del tiempo en la revista Pigeon Rit, en los términos siguientes: una falla es una falta de fuerza, una falta de velocidad. Para lo que es fondo, hace falta tener en cuenta también la resistencia. Porque, queridos lectores, la fuerza y la resistencia son dos cosas diferentes. La fuerza es condicionada por los músculos y la osamenta, en tanto que la resistencia es condicionada por los pulmones y el corazón, como también por la facilidad o flexibilidad del vuelo.
El poder de los músculos se aprecia apreciando los pectorales (que deben estar firmes y ubicarse de manera efectiva en los dos costados del esternón); la musculatura en los alrededores de las articulaciones del ala y del hombro, de la espalda, y sobretodo de la cadera.
En cuanto a la dureza de la carcaza, uno la puede evaluar presionando sobre la espalda. Si la caja toráxica cede fácilmente, se tratará de palomas incapaces de cubrir largos recorridos, incluso si sus huesos son gruesos.
Los huesos son gruesos cuando el esternón lo es, los hombros son fuertes y el ala de cierto espesor. La delgadez de las articulaciones del ala implica una musculatura insuficiente o huesos débiles.
Entonces, todo es cuestión de relación entre la estructura ósea, el peso y la fuerza de las alas. Cuanto más pesada es una paloma, más deben ser fuertes los huesos y más grande debe ser el poder de las alas. Aquellos que conocen este equilibrio, y han aprendido a apreciarlo manipulando buenas palomas, puedo decir que han comenzado a conocer algo fundamental en colombofilia.
Es después de haber dejado nuestras palomas uno o dos días sin alimentar, que nosotros identificaremos la mejor. Es ahora que uno sentirá si una paloma tiene buenos músculos o no, y en los casos negativos, sabrá que esa paloma no dará resultados.
Sabemos igualmente que es una estructura ósea cerrada. Es muy bueno también verificar su solidez presionando sobre los riñones de la paloma. Desde abajo, colocaremos los dedos en el extremo del esternón. Si la caja toráxica cede a la presión, es porque la paloma tiene una débil osamenta, lo que es absolutamente negativo en su constitución.
El grosor y la fuerza del ala. Sujeto fácil para un cronista colombófilo, pues uno podría escribir páginas y páginas, ¡hasta volúmenes de un libro! En efecto, ¿no es acaso la pesadilla de los constructores de aviones? El espesor y la fuerza del ala tienen igualmente relación directa con el motor. El estudio de estos tres puntos nos dará mucho conocimiento al respecto de las cualidades deportivas de una paloma.
Para obtener una velocidad máxima sobre recorridos reducidos o medianos, una paloma debe tener un cierto peso, de acuerdo obviamente a su tamaño. Más esto es verdad si a su vez el ala y el motor son igualmente buenos.
Velocidad – Fondo, esa es la división sobre la que se puede marcar diferencias, el límite que no puede ser sobrepasado, so pena de forzar a la paloma. La velocidad pura es un complejo de fuerza muscular, de tensión extrema, de prestación máxima de los músculos, en un tiempo muy corto. En tanto que el trabajo de los músculos no dura mucho tiempo como para agotar las reservas de energía y provocar una depresión, un premio a la cabeza es posible, incluso para los elementos flacos en resistencia. Pero cuando el trabajo de los músculos dura en cierta instancia un largo tiempo, en que el organismo debe consumir las reservas, para aportar a aquellos las últimas de azúcar (N. de la R.: y fundamentalmente de grasas), es el caso en que el límite es alcanzado.
La que vaya a ir a las etapas de más distancia, aún si es muy rápida, deberá, en todo caso, alentar el trabajo de sus músculos, para evitar su uso excesivo y destrucción, lo que le traería por consecuencia, la imposibilidad absoluta de realizar una buena performance. Ella puede volver de una depresión muy bien, al hacer trabajar los músculos lentamente, pero si aquella es muy frecuente y profunda, por el desgaste, el organismo no aguantará.
Esta usura de músculos, proveniente de esfuerzos exagerados, se descubre fácilmente entre las palomas. A veces les pedimos demasiado a nuestras mejores voladoras. Ellas se desviven por llegar a su palomar, pero quedan agotadas, o se pierden. Se reconocen como palomas “consumidas” cuando uno las toma con las manos.
¿Cómo sentimos o vemos si una paloma está consumida o desgastada?
Uno siente que una paloma está consumida o desgastada:
1.Cuando el volumen de los músculos disminuye. Cuando la paloma deviene más pequeña y desarticulada, lo que significa que los músculos están desgastados. Es en el pecho que se lo siente mejor, en los dos costados del esternón. Cuando los pectorales están como “chupados”, el ave está perdida como deportista. Igualmente, luego de que los músculos de la cadera se ablandan y uno siente una pequeña separación entre la espalda y la cola. 2.Cuando la respiración se acelere o deviene irregular 3.Cuando el corazón está débil, es decir, late más rápido o de una manera menos estable. También cuando su ritmo aumenta al menor esfuerzo, por ejemplo después de un vareo diario. Uno puede sentir mejor los latidos del corazón colocando suavemente el dedo delante y al costado de los huesos delanteros. 4.Cuando el cuerpo cede fácilmente, luego de que uno la toma suavemente entre las manos, y la paloma tiene en ese momento el pico abierto. Uno ve que una paloma está consumida o desgastada:
1.Cuando el ojo está debilitado o parece brillar de una forma húmeda. 2.Cuando los párpados se vuelven más finos y los tapan las plumas. Descubrimos así una pista del ablandamiento de los tejidos y del flujo de sangre. Al contrario, párpados voluminosos, son igual a una paloma en forma, especialmente en la parte posterior del ojo. 3.Cuando el plumaje está como muerto y sin lustre. 4.Cuando la garganta es de un color rojo violento, la lengua se eleva y los órganos superiores de la respiración están inflamados. Amigos lectores, esas son, resumidamente, las principales características. Deberá estudiarlas y actuar en consecuencia.
Partiendo de que hemos estudiado algunas debilidades y algunas cualidades básicas, como han sido descriptas, quisiera darle ahora algunas indicaciones prácticas en vista de aumentar el valor de su línea de palomas. En la época de armar los casales, esto será de pura actualidad.
Si uno quiere juzgar a sus palomas sin preconceptos, debería en lo posible hacerles un examen a todas sus palomas en la oscuridad. Siempre habrá alguien a quien pedirle ayuda. Una por una tomará cada paloma en las manos y la examinará en cuanto a los músculos, estructura ósea, plumaje, tamaño y respiración. Lo ayudará anotar para cada paloma cuales son sus observaciones sobre cada uno de esos puntos. ¡Muy instructivo! Uno aprende así a evaluar corporalmente una paloma sin saber cual es la que tiene, esto es lo principal. Uno se aleja voluntariamente de las influencias por el exterior y por un complejo de toda suerte de circunstancias, que perjudican la evaluación.
Uno encuentra resultados sorprendentes de tal juzgamiento y de todo lo que le permite aprender. Defectos que uno no conocía o a los cuales no les había prestado atención, aparecen fácilmente en la oscuridad. Uno descubre entonces inmediatamente cuales defectos amenazan su línea de palomas, en que dominio uno actuará severamente, cuales palomas hará acoplar buscando mejorar, o si deberá proveerse de criadores para tener confianza en su plantel.
Severidad en la clasificación y acoplamientos juiciosos son las bases sobre las cuales la formación de una línea deberá ser establecida. No he ahora hablado de la sanidad de esta línea. No hace falta decir que esto debe ser el punto de partida para todo lo hablado, por lo que doy por sentado su comprensión por todos los lectores para comenzar.
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